Dolores Vendrell Guerrero nace en Barcelona en 1947. Madre de dos hijos y abuela, es licenciada en Filosofía y Humanidades; trabaja al terminar sus estudios durante cuatro años en una escuela rural de Ruanda. A su vuelta a España, trabaja como profesora de Francés en Institutos de Enseñanza Media, hasta el momento de su jubilación. A partir de ese momento, continúa en contacto con alumnos y alumnas de Institutos, en talleres de escritura y teatro, y más tarde comienza su trabajo de activista en movimientos sociales de Economía Social y Solidaria. A lo largo de toda su carrera, la pasión por la lectura y la escritura la acompaña. Publica algunos ensayos, novelas y relatos ilustrados, con la colaboración de su hija Nuria Gómez en las ilustraciones.
Ha publicado en colaboración con María Mañas “Leve atardecer”,
considerado por la Vanguardia entre los mejores libros de espiritualidad de
2023. Su ultimo libro “Baila Amor”, esta nominado para la Gala de la Editorial
Cordel de Prata que se celebra en Lisboa.
Dolores Vendrell, junto a su hija, Nuria Gómez en la presentación de "Punto de encuentro, más allá de los mitos" en la Biblioteca Ciudad de Nejapa, Alcorcón.
Con María Mañas, en la presentación en el Ateneo Popular de Alcorcón.
A lo largo de toda mi vida, me ha
inspirado la figura de Jesús de Nazaret y su mensaje. Con los años, mi
pensamiento se ha hecho más crítico, he encontrado otras interpretaciones de la
realidad, desde el pensamiento de la Ilustración francesa, tan crítico con todo
tipo de fanatismo o integrismo, hasta el existencialismo, especialmente en las
obras de Albert Camus y su paso desde el absurdo al compromiso social. De
Oriente, me ha atraído la espiritualidad del hinduismo y el budismo, y en mi
compromiso social he trabajado con personas ateas, marxistas o agnósticas,
comprometidas por la justicia social y la solidaridad. Comprendo y respeto las
diversas respuestas que las personas han encontrado a lo largo de la historia. He
aprendido con todo ello a lo largo de mi vida, y sé que lo que nos justifica no
son las ideas sino nuestra respuesta a lo que la vida nos requiere. Esta
respuesta no puede ser otra que el agradecimiento profundo por el don de la existencia,
superando el miedo, la soberbia y el egoísmo, y el compromiso y entrega a los
demás, la compasión que anunciaron los grandes Maestros.
Hoy no reniego de mis raíces,
siento que Jesús de Nazaret es patrimonio de toda la Humanidad. Significa el abrazo
que nos libera, nos alza hasta un Origen común que nos hace iguales y nos une a
todos como hermanos.
He dedicado toda mi vida a la educación de los jóvenes, desde mis libros deseo compartir con ellos, y con todas las personas sea cual sea su edad, lo que he aprendido a lo largo de mi vida, muchas veces a pesar de los sufrimientos y dificultades. He buscado cómo salir a flote a pesar de todo, qué sentimientos y actitudes hay que cultivar en nosotras mismas y que prácticas nos pueden ayudar. Todas las personas necesitamos apoyarnos unas en otras, de la mano llegamos más lejos.
Un mundo mejor es posible, pero no sin nuestro compromiso y resistencia.
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