Me viene a la mente las palabras de Vicente Ferrer: no se trata de explicar la pobreza sino de remediarla.
Sobran discursos, promesas, proyectos; lo que hace falta es ponernos en marcha, con los pies en el suelo, sin miedo a ensuciarnos de tierra ni a doblar la espalda en la labor. Pero al mismo tiempo es imprescindible enraizar nuestra acción en lo más profundo de nuestro ser para que nuestros actos superficiales no acaben secándose o dando frutos amargos. Que la fuente que alimente nuestros actos sea el AMOR.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Ser parte de la Utopía
Deseo agradecer a todas las personas que compartieron conmigo un momento muy especial, la presentación de mi breve ensayo "Punto de e...

-
Durante días, en mi habitación tecleando en mi ordenador, he ido construyendo una historia, rebuscando en recuerdos, pensamientos, sens...
-
¿Pero qué es eso? Me tengo que agachar para leer una pequeña pancarta :"Yo primero". Tengo que usar la lupa para leerlo, y ella ¿...
-
Lo escuché de nuevo sentada en el suelo en una asamblea de barrio. El discurso final del Gran Dictador de Charles Chaplín. Hoy cambio “sold...
No hay comentarios:
Publicar un comentario