sábado, 5 de noviembre de 2016

Conecta con tu paz interior: una propuesta para el puente de Diciembre.

Soñaré que puedo estar allí...comparto con todas las personas que podáis estar interesadas; conozco a Nacho Duque y a Joan Carrero, y os lo recomiendo....

Vive una experiencia inolvidable! Retiro del 2 al 7 de Diciembre (6 días) en Mallorca: "Conecta con tu Paz Interior" 385€ pensión completa OFERTA hasta el 12 de Noviembre
Playa,montaña, una preciosa ermita en la que hacer Yoga y meditar… ¡¡¡lo tiene todo!!!
Dónde: Agroturismo S’Olivar, en Mallorca, en la Sierra de Tramontana.
Disfruta de la mano de Joan Carrero (Candidato al Premio Nobel de la Paz) y de Nacho Duque (Profesor de Yoga) unas verdaderas vacaciones de las que regresar a tu vida cotidiana lleno de energía, relajado y con un mayor bienestar físico, emocional y mental.
Pensión completa con comida vegana y alojamiento en casa rural.
Billete de avión desde 30€
Para inscribirte llama al 655738607 o escribe a igduque@gmail.com
 Mas información www.exodo.org/mallorca

Puente de Diciembre: 6 días de Retiro en Mallorca “Conecta con tu Paz Interior” Vive una experiencia inolvidable este puente de Diciembre en el mágico…
EXODO.ORG

lunes, 24 de octubre de 2016

Corruptos y corruptibles.

Aparco por un momento los recuerdos de mi etapa en las aulas, para compartir algunas de las ideas que me rondan estos días.

Es la hora de ponerse a trabajar y a legislar para regenerar la vida política. Pienso que esta regeneración no será posible si no somos capaces de reconocer que todas las personas no son corruptas (sean del partido que sea) pero que todas son corruptibles (sean del partido que sea). El poder y la notoriedad que dan el ejercicio de la política son los mejores ingredientes para que se dé el paso entre corruptible y corrupto.
No se regenerará la política por la creación de un nuevo partido, porque (sea el que sea)  lo componen personas, y la historia nos demuestra machacona que hasta los que se presentan como los más puros acaban atrapados por el ansia de poder, riqueza y gloria.
Hay que empezar, y con urgencia, una regeneración ética. Para ello hay que legislar y crear códigos éticos y reglamentos exigentes, no solo en los preludios y declaraciones de intenciones,  sino en la letra pequeña: es ahí donde poco a poco se va deslizando hacia la corrupción. Se empieza por lo pequeño, se acaba con los fraudes de los que estamos siendo testigo estos días. Se habla mucho de asaltar los cielos, de condenar a los corruptos, de quitar a unos para dárselo a los otros, pero se habla poco de crear la vacuna, los diques, que contengan e impidan que el corrupto que todas llevamos dentro gane la partida. No muchos salen sanos y salvos de este trance, afortunadamente los hay, y aquí no puedo dejar de mencionar a una persona que admiro no por lo que dice, sino por lo que hace: José Múgica, expresidente de Uruguay, un ejemplo de paso por la política honestamente.
Otro aspecto preocupante es la transición a una democracia participativa. Se habla mucho de dar la palabra al pueblo, y aquí se vuelve a olvidar que el pueblo no es un ente abstracto, sino un conjunto de personas capaces de todo lo bueno pero también de todo lo malo. Un pueblo que ha sido educado en y para un determinado sistema competitivo e insolidario. Por otra parte, las personas, la sociedad civil, los trabajadores, tienen sus propias tareas con las que contribuyen al bien común de la sociedad, y su participación en la vida política no puede ser ilimitada.

Pienso que la democracia participativa debe empezar por la exigencia de transparencia total por parte de la clase política (desde ingresos, salarios, agendas de trabajo, nombramientos de cargos de confianza...) Los ciudadanos deben saber lo que hacen los políticos, pero es obvio que los ciudadanos no pueden hacerlo todo: cada persona su tarea. Empecemos por informar con transparencia, en crear espacios de participación eficaces y organizados, y hagamos cada una la tarea que nos corresponde.

sábado, 1 de octubre de 2016

Cada existencia es única y maravillosa, como el tesoro escondido que hay que agradecer y gozar cada amanecer.



He aquí el tesoro que quisiera encontrar: el secreto de la serenidad y la felicidad. No podemos alcanzarlo si vivimos con el miedo de perder lo que tenemos, o con el deseo de tener lo que aún no poseemos. Todo es efímero, todo es limitado e incompleto en nuestras vidas. Pero cada existencia es única y maravillosa, como el tesoro escondido que hay que agradecer y gozar cada amanecer como el más hermoso de nuestra vida. Existe el sufrimiento y el dolor, existe una maldad que apenas es comprensible, pero cada uno es dueño de elegir vivir en paz, lo cual no significa pereza o abandono; descubrir que la existencia es un regalo y un deber compartirla y hacerla florecer; no enterrar los talentos, cultivar en la tierra de nuestra vida y nuestro tiempo limitado el don de nuestro ser. En definitiva, elegir ser feliz.


domingo, 12 de junio de 2016

Utopía, que no es lo contrario de realismo sino de mezquindad, utopía como generosidad transformadora, lucidez y coraje.

Viernes 10 de abril: comienza la campaña para las elecciones del 26J. Me han invitado a una charla coloquio, no se trata de ningún acto de precampaña. Es un encuentro con Joan Carrero, mucho menos conocido que cualquiera de los protagonistas que estos días nos bombardean con sus promesas electorales. “Pacifista mallorquín. Fue candidato al Premio Nobel de la Paz en 2000 por la labor realizada en favor de la paz al conflicto de los Grandes Lagos en África. Preside la Fundación S'Olivar” es una breve reseña que encuentro en internet, tengo que reconocer que yo tampoco lo conocía, a pesar de mi vinculación con Ruanda. “¿Qué harían Kasturba y Mahatma Gandhi y Coretta y Martín Luther King en este momento crítico?” es el título de la conferencia.



A veces es algo más que las palabras lo que nos impresiona y nos toca por dentro. Esto me ocurrió el viernes. “Me hace pensar en Vicente Ferrer” comento a un amigo común. “Eran grandes amigos” me explica, y no me sorprende. Un luchador infatigable, cada una de sus palabras son ratificadas por su acción. La acción por los demás, como Vicente Ferrer.
Quiero compartir con todas las personas que me leen algunas de las reflexiones que recogí y en las que encuentro apoyo y fuerza (sé que a algunas les hubiera gustado poder asistir).  Que el más pequeño paso adelante de una persona supone un avance para toda la humanidad, hasta el más pequeño puede cambiar el rumbo de la historia. 

jueves, 5 de mayo de 2016

El verdadero apoyo, en el fondo de nuestra conciencia.

Te apoya quien te descubre tu propia fuerza, la que todas tenemos en el fondo de nuestra conciencia, no quien resalta su fortaleza frente a tu debilidad. Te apoya quien te muestra que no lo necesitas, o más bien que nos necesitamos todas mutuamente para descubrir nuestro propio tesoro en nuestro interior, la fuente de la fuerza y la felicidad. 




Te apoya quien no te ata ni te hace dependiente, sino quien te muestra tus propias alas para volar libre.  Padres y madres, amigos y amigas, personas que caminan un trecho con nosotras: quienes te dejan marchar aunque estén siempre en tu corazón y tú en el suyo.

martes, 3 de mayo de 2016

Mi hermosa Ruanda, la historia interminable.

Continúo ofreciéndoos páginas de mi novela "Mi hermosa Ruanda". Una historia de vida y muerte, de amor y guerra, como toda la historia humana, la historia interminable. Hoy quiero rendir homenaje a los médicos muertos por los bombardeos en Siria, esos hombres y mujeres que dan la sus vidas por salvar las de los otros.


Disponible en la librería Traficantes de sueños
C/ Duque de Alba, 13
28012 Madrid
Tf. 915320928
Metro Tirso de Molina
http://www.traficantes.net/

"Ya había anochecido cuando Clara salió al porche del hospital. El perfume de la noche no conseguía apagar el olor a sangre y desinfectante. El cielo estaba cubierto de una espesa neblina y un inusual silencio lo envolvía todo. Yo estaba apoyada en uno de los pilares del porche. Junto a mí estaba Pierre. Una mariposa nocturna revoloteó en torno a la luz de la entrada, luego huyó y se perdió en la noche. Clara se volvió hacia nosotros, nos saludo con un ligero gesto de la mano y se retiró con sigilo para entrar de nuevo en el hospital. Vi por el ventanal como se acercaba a Alberto que seguía vendando la pierna de un anciano y apoyó la cabeza en su hombro. Entre los dos terminaron de vendar al herido antes de retirarse a descansar a un rincón de la sala donde se recostaron contra la pared con las manos entrelazadas.
Nosotros nos habíamos sentado en los escalones del porche. Las palabras habían salido a borbotones, empujándose, tropezando. Tantos años resumidos atropelladamente, temblando de emoción por tantas cosas compartidas. La lejanía, la espera, la añoranza. Y ahora, el horror. “Mi madre es ruandesa, mi padre belga” había contado Pierre. “Clara es mi madre, y Uimana; vamos a buscarla para que vuelva con nosotros a España” le expliqué, y que había nacido y crecido en Ruanda, con mis dos madres y mi hermano Javier. Y cómo no había pasado un solo día que no hubiese soñado con volver. “Yo nací lejos, en una ciudad envuelta en la niebla, pero mi madre me hizo soñar con el sol y el cielo de Ruanda, con sus mil colinas y sus hermosos lagos. Lo veía todo en la luz de sus ojos” susurró Pierre. Y ahora tanto dolor, tanta crueldad_  nos quedamos mirándonos en silencio sin poder seguir hablando. Pierre alargó la mano y su dedo acarició mi frente, mis mejillas húmedas, y mis labios que temblaban. Sentí que sus dedos olían a orquídeas, y que el sol lucía más allá de la noche. Por un instante retrocedí en el tiempo, creí verme en medio del camino de la escuela junto a Paul con el corazón encogido al decirle adiós susurrando promesas infantiles; y luego, recelosa y atemorizada en mi pupitre y en la tarima al señalar con el puntero donde se encontraba Ruanda en el mapamundi mientras oía las risas de los demás niños. Ahora el tiempo no existía, sólo la caricia de Pierre en mis labios que me hacía huir lejos de mi tierra herida. Alcé la cabeza y nos besamos temblando como dos niños perdidos en la oscuridad". 

martes, 26 de abril de 2016

Yo acojo.

Desde mi blog difundo la propuesta de Amnistía Internacional, e invito a entrar en el enlace para firmar la petición. En este momento hay recogidas 45.244 firmas. Cada una de nosotras contamos en la lucha por los Derechos Humanos, la lucha de AI y de millones de personas.


"España: queremos un lugar seguro para las personas refugiadas
Desde Amnistía Internacional, hemos decidido poner en marcha el manifiesto #YoAcojo. Porque estamos en contra de los atropellos que están sufriendo las personas refugiadas, y pensamos que podemos y debemos acoger.

Lee el manifiesto y únete a él".

Ser parte de la Utopía

Deseo agradecer a todas las personas que compartieron conmigo un momento muy especial, la presentación de mi breve ensayo "Punto de e...